Considerada hoy como una de las mejores películas de la historia del cine, Blade Runner fue en su día un rotundo fracaso de crítica y público. El británico Ridley Scott fue el encargado de trasladar a la pantalla el magnifico guión de David Peoples, basado en la novela "¿Sueñan los andróides con ovejas eléctricas?" de Philp K Dick. Fueron necesarias dos adaptaciones de la novela de Dick para que la Warner diera el visto bueno, y es que, la versión de David Peoples supera con creces la novela. Sería díficil quedarnos con una escena simbólica de ésta película, pero destacaré la escena final (¡el que no la haya visto que deje de leer!), cuando Roy Batty (Constantino Romero) salva la vida de Rick Deckard minutos antes de morir. Un final verdaderamente bello que reflexiona sobre el sentido de la vida y la muerte en una sociedad futura.
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